23 febrero 2006

Quiero expresar mi gratitud a los golpistas del 23 F por sanar la democracia de este país. Esta mañana he escuchado a un periodista que Tejero y su grupo actuaron como una vacuna y estoy completamente de acuerdo. Las vacunas son pequeñas dosis de virus vivos pero atenuados que activan nuestro sistema inmunológico provocando la síntesis de anticuerpos para combatir estos antígenos.
Parece mentira pero esta vacuna creo que es de las que necesitan recordatorio, ya que se han detectado rehabilitaciones de virus añejos y apariciones de nuevas versiones. Los primeros se pueden combatir fácilmente por su edad avanzada pero los segundos son los más peligrosos.

A quien lea esto, no pasemos por alto actitudes fascistas, racistas, déspotas que detectamos diariamente. Todos nosotros nos tenemos que implicar en la medida de lo posible, y recriminar estas actitudes, en casa, con los amigos, desde nuestro trabajo. Somos responsables de que la cantera de adultos de esta sociedad juegue en la liga de la tolerancia y el respeto.
Si, ya lo sé, empiezo con churras y acabo con meninas. Pastora

5 comentarios:

SEITONAS dijo...

Pastora, de la militancia seitó.

SEITONAS dijo...

Me encantan tus reflexiones...y q mezcles xurras con meninas, nadie lo podría hacer mejor...
Estoy completamente de acuerdo...de lo q son capaces esos bixillos eh?(los virus)

SEITONAS dijo...

Hola Acuarela!, como dices no tuvo mayores consecuencias, pero si tuvo consecuencias y a eso me refiero en el texto. Sirvió para darnos cuenta que esas actitudes están fuera de lugar y que todos nosotros, la gente de a pie, los que comemos de tanto en tanto en un fast food, nos gusten los colores que nos gusten, rojos, azules,...queremos decidir libremente a quien queremos tener como representantes. A mi me sienta mejor el rojo, por eso, jejeje. Pastora

SEITONAS dijo...

visca la llibertat!!!!
visca la no opresió!!!
visca la terra!!!
DMS

SEITONAS dijo...

No podría estar más de acuerdo contigo, Pastora. Creo que sirvió para expulsar muchos demonios que existian. Lo triste es que aún hay cierta gente que está poseída. Pero yo soy positiva y optimista y aunque a veces las cosas pinten peor, sé que en algún momento, alguna generación conocerán en realidad lo que significan las palabras libertad y paz.