01 febrero 2006

Respecto a unas entradas de Pastora y Marona, pensaba en el valor de la amistad. Amigos de siempre que a veces echamos a perder por malentendidos, por falta de tiempo, o a veces por falta de valor para enfrentarte a ellos después de tiempo desconectados, porque la vida nos marea de un lado a otro. Volver de Inglaterra supuso el reencuentro con muchos y el desencuentro con varios. El estar pachucha tampoco me ayudó mucho, aunque vosotros sí ayudarais. Siempre hay que estar a tiempo para pedir perdón y volver a recuperar esos lazos que tan apreciados son para uno. Así que si mi distancia ha herido a alguien, y sé que así es, lo siento de corazón, y no sólo es una frase hecha. San y tidroj, y muchos más que andan por ahí. Lo importante es lo que tienes en la vida, como me dijo uno de ellos. Y si no lo tienes, ¿qué vida es esa? Mi besuc y mis seitonas ayudan y son parte fundamental de que todo esté bien, pero a veces necesitas esos amigos de siempre con los que no decir nada es decirlo todo. A los otros y a las de aquí. When you're down and in trouble, and you need a helping hand, just call out my name...you've got a friend.

2 comentarios:

SEITONAS dijo...

Me identifico mucho con lo que has escrito, soy experta en dejar que el tiempo, la distancia, la no coincidencia, y muchas más cosas propias de un carácter independiente y todavía inmaduro entonces, me separe de muy , muy buenos amigos. Me duele por dentro cuando lo pienso, y lo pienso. Para mi amiga del alma que el 11 de enero cumplió 33 años.

SEITONAS dijo...

Perdón. Pastorcilla la loquilla